ESPAÑA. Montañas de sal, derivaciones repetidas del caudal, indústrias y minicentrales eléctricas, especies invasoras, infrastucturas urbanas, todo esto y más forman parte del paisaje de uno de los ríos más importantes del país. El agua del Llobregat nutre el 30% de los recursos hídricos de Cataluña pero a su paso por el Baix Llobregat toda esta acumulación de abusos humanos se plasman en una pèrdida dramàtica de calidad de su agua, medioambiente y ecología.
En este documental, Marta Amat, fotógrafa ambientalista, recoge los principales emplazamientos que afectan a la salud del río evidenciando el emprobecimiento de un espacio natural tan importante para el medioambiente de la zona como para las poblaciones vecinas. La absurdidad de querer vivir a expensas de un medio sin el respeto y consideración para su subsistencia natural.
Estas fotografías forman parte de la exposición Viu, beu, veu el Llobregat promovida por la plataforma social Llobregat SOStenible. La exposición itinerante esta viajando por los distintos municipios del Baix Llobregat adheridos a la Comisió del Llobregat, un espacio de debate y presión ciudadana y municipal que buscan conjuntamente la forma de salvaguardar y recuperar la salud y espacios propios del río.