Madrid ha sido escenario de películas durante muchos años. Por desgracia la mayoría de ellas tenían que ver con el cine nacional, ya que las trabas burocráticas que deben salvar las producciones extranjeras son muchas veces un buen revulsivo. Aun con todo, muchos lugares por los que pasamos cada día han albergado películas conocidas.
El día de la bestia (1995)
Empezamos la lista con un título que mucha gente conoce, pero que en comparación pocos han visto. En esta película preapocalítica un grupo de amantes del heavy metal (encabezados por un joven Santiago Segura) se enfrentan a la posibilidad de que las Torres Kio (las torres inclinadas de Madrid) sean las puertas al mismo infierno; que esperan el cambio de milenio para desatar el apocalipsis.
La película se aprovecha de la teoría illuminati de unas torres que en un principio se iban a unir en la cúspide formando un triángulo, pero el proyecto fue desechado por técnicos municipales que lo consideraban peligroso.
Está dirigida por Alex de la Iglesia en la época llamada como “dorada” del director, y que precisamente con el cambio de milenio empieza a decaer. Como curiosidad Santiago Segura recibió el Goya al mejor actor revelación.
Abre los ojos (1997)
Quizá el título de la película no nos diga nada. Pero seguramente a todos nos suene la escena en la que un sorprendido Eduardo Noriega camina por una desierta Gran Vía. Justo por el mismo centro, provocando un atasco monumental de haber sucedido en un día normal.
Justo esta escena es una de las más conocidas tanto a nivel nacional como internacional del cine español y que apuntaló el emergente nombre de Alejandro Amenábar como director.
Hasta aquí puedo leer, la película es un thriller psicológico al que hay que enfrentarse sin ningún (o casi ningún) conocimiento previo del argumento. Para ser capaz de sorprendernos y perdernos dentro del laberinto que es el guión de la película. La repercusión internacional provocó que se hiciera un remake en EE.UU, donde Penélope Cruz (que en el film interpreta a Sofía) repite en el mismo papel.
El Bola (2000)
Otra película mítica del cine español. El film nos regala muchas escenas por las calles de Madrid, y varias bastante asfixiantes en las vías de cercanías de la ciudad.
La película impulsó la carrera de Juan José Ballesta, que empezó a recabar reconocimientos a partir de ese momento (y con algunos altibajos).Como lugares reconocibles tenemos el parque de atracciones de Madrid. Donde un atribulado Pablo (El Bola) encuentra uno de los pocos momentos felices de su vida junto a su amigo Alfredo.
El film es una hábil disección del punto de vista de los niños sobre la violencia doméstica. Y los diferentes mecanismos que tienen para enfrentarse a esa situación (tanto de forma sana como no).
Isi-Disi: Amor a lo bestia (2004)
Otro título que remueve recuerdos. Y de nuevo con Santiago Segura, aunque a diferencia de con “El día de la Bestia” esta vez ya con una carrera mas asentada.
En esta primera aventura Isi (Santiago Segura) y Disi (Florentino Pérez) están envueltos en una cómica carrera de obstáculos para que Isi consiga el corazón de Vane (Jaydy Michel). La película se encuentra ambientada en varios lugares de Leganés.
La escena estrella sucede cuando la pareja se lanza en paracaídas para colarse en la Plaza de Toros de Vistalegre, en pleno concierto de Joaquín Sabina (que cuenta con un par de frases en la película).
El ultimátum de Borune (2007)
Cerramos con una película americana. Y parte de una saga conocida por muchos. Porque estaba feo no incluir ninguna de las pocas extranjeras que toman parte en Madrid.
La última película recoge escenas en Atocha y en el Paseo de la Castellana, terriblemente pocas como estar en puesto que sea el último de la lista. Pero de las pocas producciones extranjeras “actuales” que tienen lugar en la ciudad de Madrid.
Y ahora ya conoces algunos lugares, como decía al principio muchos de ellos de los que se me han quedado en el tintero corresponden al cine español. ¿Por qué un país tan exótico para el ojo extranjero visita tan poco Madrid? Burocracia, quizá con nuevos tiempos este problema tan grande para la marca madrileña en el extranjero se solucione.