Algo que no todo el mundo sabe es que para que una obra tenga derechos de autor no es necesario incluirla en ningún registro: los derechos de autor nacen junto con la obra.
Esto quiere decir que si tomas una foto y la subes a tu blog esa foto es tuya, y a no ser que especifiques lo contrario o lo haga la plataforma a la que la has subido nadie podrá usarla (legalmente).
Por otro lado tenemos el Copyright, se diferencia de los derechos de autor en la medida en la que este solo afecta a la obra. Un músico puede componer una canción y tener los derechos de autor de la misma, pero la discográfica tendrá los derechos de Copyright, los cuales le permiten explotarla.
En diferentes situaciones una obra se quedará sin derechos de autor, generalmente esto ocurre pasado un tiempo después de la muerte del autor (70 años en muchos países). En este momento la obra pasa a ser de dominio público por lo que cualquiera va a poder usarla sin problemas. Algo a tener en cuenta es que aunque una obra sea de dominio público las obras derivadas de ella crean nuevos derechos de autor. La Sinfonia No 9 de Beethoven es de dominio público, pero el concierto de la Orchestra filarmonica di Vienna no.
Otro tipo de licencia es el Copyleft, el opuesto al Copyright. Cuando una obra posee este tipo de licencia se garantiza que siempre va a estar libre, tanto la obra en sí como cualquier derivado que nazca de ella. Un ejemplo es el SO Linux, es de código abierto y gratis y cualquier variación que se haga de él tendrá que seguir siéndolo.
En la era de internet han aparecido una nueva variedad de licencias, que son las que a ti te interesan, pues te van a permitir usar imágenes que no sean del siglo pasado. Estas son las Creative Commons (CC). Nacen en 2002 y se dividen en 7 licencias diferentes:
1-Dominio público (CC0): El autor renuncia a todos sus derechos sobre su obra, la situación legal de esta es similar a la del dominio público del que hablábamos anteriormente.
2-Reconocimiento (BY): Puedes hacer lo que quieras con la imagen, incluso ganar dinero con ella, eso sí, debes reconocer siempre la autoría original.
3-Reconocimiento – Compartir igual (BY-SA): Es similar al anterior, pero en este debes usar la licencia original en las derivadas.
4-Reconocimiento – No comercial (BY-NC): Puedes hacer imágenes derivadas, pero tanto estas como la original no pueden tener fines comerciales.
5-Reconocimiento – No Comercial – Compartir Igual (BY-NC-SA): Igual que la anterior, pero en este caso las derivadas deberán tener la misma licencia que la original.
6-Reconocimiento – Sin obra derivada (BY-ND): Se permite el uso comercial, pero no la generación de obras derivadas.
7-Reconocimiento – No Comercial – Sin Obra Derivada (BY-NC-ND): No se permiten los fines comerciales ni hacer derivados.
Como ves las imágenes de internet tienen una gran variedad de licencias, y muchas de ellas nos dan bastante libertad. Aqui te dejo una lista de cinco portales donde encontrar material que vas a poder utilizar sin tener problemas. Existen infinidad de esta clase de páginas para buscar imágenes libres, ¡ya no hay excusas para hacer tu propio blog!.
Gastisography
Un banco totalmente gratuito. Es difícil encontrar algo concreto y no tiene tanta variedad como otros portales de la lista, pero te sorprenderá la calidad de sus fotografías.
Unsplash
Es un banco gratuito y también una comunidad, pueden participar en él y subir tus fotos para que otros usuarios las usen.
MorgueFile
13 millones de imágenes de calidad que vas a poder usar sin necesidad de registrarse. Algunas de ellas tienen licencias más restrictivas, pero todo es mirarlo.
El buscador oficial de Creative Commons
Te redirige a gran variedad de buscadores (como flickr) donde tendrás acceso a millones de imágenes libres. ¿Qué más hace falta decir? Una de las mejores herramientas de Internet para este fin.
Stock Vault
No es solo un banco de imágenes libres, tiene tutoriales, texturas… Un equipo entero de profesionales que te ofrecen el mejor contenido, ¡Gratis!.