Tiene las mismas características y la misma consistencia que ese animal, pero se produce con fibras de algodón y lino, revuelo en los aceites de maíz, soja y vegetales, y montado en diferentes capas.

Richard Wool, es un ingeniero estadounidense y profesor de la Universidad de Delaware, cuya invención promete revolucionar la industria textil.

Al igual que la piel animal, la vegetal ecológica de hecho puede ser utilizada para hacer zapatos, bolsos y accesorios, ofreciendo las mismas características y el rendimiento de resistencia y transpirabilidad.

En efecto, es aún más fuerte y más duradera que la de cuero, así como más barata.

Por no hablar de que por su producción se ahorra agua y energía y no se utilizan productos químicos contaminantes para el bronceado.

La innovación también reemplaza los compuestos basados ​​en fibra de vidrio que utilizan polímeros o resinas, así de encontrar también aplicación en campos distintos del calzado, tales como en la construcción, en la industria del automóvil y de la máquina agrícola.

Es evidente que el interés en todo este material fue inmediatamente genial: empresas como Nike, Puma y Adidas ya están probando muestras de esta innovación ecológica, que ofrecerá productos veganos (es decir, libre de materia animal) a sus clientes.

Sin embargo, debemos ser pacientes antes de encontrar en las tiendas zapatos y otros productos a base de cuero vegetal. Dada tal material está en fase de desarrollo, el camino hasta las estanterías de las tiendas es todavía largo. También debido a la repentina y prematura muerte de Wool, en marzo pasado.

Sin embargo, lo cierto es que los animales ya se agradecen: una vez que la producción estará completamente desarrollada, el “eco-cuero” podría ser decisivo para el impacto del uso de productos que no sean de origen animal.

Como inventor mismo solía decir “podemos diseñar una piel de mucha mejor calidad que la de un animal.”

Para las suelas de los zapatos, en cambio, utiliza un material hecho de plumas de pollo procedente de los residuos de procesamiento: en los Estados Unidos producir anualmente alrededor de seis millones de toneladas de estas fibras de plumas de pollo, que son un problema en la eliminación residuos para empresas de procesamiento de pollo.

Richard P. Wool ha dedicado su carrera a la búsqueda de componentes de energía sostenibles y renovables. En 2013 fue galardonado con el Premio de Química Verde de Ordenación Académica de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (US EPA), y fue uno de los cinco ganadores de la Química Verde Desafío Presidencial.

Sus descubrimientos han llevado al desarrollo de materiales compuestos a base de soja que se utiliza para hacer barcos, tractores, paneles y partes de turbinas de viento.
Ahora su trabajo se llevará a cabo por la puesta en marcha de Eco-cuero Corporación que fundó con Nike y Puma con el fin de desarrollar un calzado deportivo producido a partir de materiales no tóxicos y de la planta.