GUADALAJARA, ESPAÑA. Según los últimos datos publicados por el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), el número de desempleados hasta febrero de 2013 en España asciende a un total de 5.668.292 personas.

En los últimos años, esta cifra no sólo no ha cesado de incrementarse, sino que no deja de aumentar mes a mes. Los problemas derivados de la tasa de desempleo han conseguido que, palabras antes apenas conocidas en la sociedad, como dación en pago o desahucio, hayan adquirido una relevancia de tal calibre que nos acompañan casi a diario en todos los informativos. De estos números dramáticos, no se puede excluir ningún grupo de edad, ya que más de medio millón de jóvenes menores de 25 años está en paro.

No obstante, y pese a esos aterradores números de desempleo, no toda la cara de la crisis es negativa y encontramos empresas que pueden decir en voz alta que están luchando activa y diariamente para salir adelante. Es el caso de FisioAzuqueca, una pequeña clínica de fisioterapia situada en Azuqueca de Henares, en Guadalajara.

En este centro trabajan tres personas de lunes a sábado y desde por la mañana, hasta bien entrada la tarde. Una de ellas, Beatriz Ortigado García, es una joven menor de veinticinco años, diplomada en fisioterapia.

¿Cuánto tiempo llevas trabajando en esta clínica?
B. Ortigado: En mayo se cumplen dos años desde que empecé a trabajar aquí.

¿Encontraste este trabajo recién terminada la carrera?
No. Estudié durante tres años la Diplomatura en Fisioterapia y al acabar busqué empleo unos meses. Trabajé algún tiempo como fisioterapeuta en un equipo de fútbol y luego tuve la suerte de llegar hasta aquí.

¿Cómo supiste que había hueco para ti en esta clínica?
No lo sabía. Un conocido mío me aconsejó que fuera allí a dejar un currículum y llegué en el momento justo. Mi jefa acababa de abrir la clínica y necesitaba personal.

¿Qué tal funciona la clínica?
Muy bien, pero apenas descansamos. Trabajamos de lunes a sábado descansando dos horas para comer. Lo bueno de una clínica de este tipo es que la gente siempre vuelve. Y, a parte de los que vuelven, también se apuntan personas nuevas para que las tratemos. Por lo que no paramos.

Parece difícil que una clínica privada pueda funcionar tan bien, ¿ayudan los precios a que la gente acuda a tratarse?
Sí, no solamente los precios, sino el tratamiento. Nosotros realizamos tratamientos basados en terapia manual de una hora, mientras que en la mayoría de las clínicas los tratamientos suelen estar basados en 30 minutos de electroterapia y 15-30 de terapia manual por un precio idéntico o más elevado. Pero al final lo que la gente busca en un tratamiento privado es lo manual.

Los datos de paro juvenil no son buenos. ¿Te consideras una afortunada?
Sí. Y no solo porque esté trabajando, sino porque las condiciones que tengo son muy buenas. Conozco gente que trabaja lo mismo, o más, que yo al día por menos dinero. Incluso que no cobran.

¿Dónde te ves dentro de dos años, por ejemplo?
Aquí, si las cosas siguen como hasta ahora.

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Actualmente, los jóvenes menores de 25 años sin empleo suponen un 9,2% de la cifra total de parados. Esto significa que, en comparación con otros grupos sociales, los jóvenes se encuentran entre las personas con más posibilidades de encontrar un trabajo. La constancia, el esfuerzo y el sacrificio son fundamentales para conseguir los objetivos y son tres cualidades que, ahora más que nunca, hay que manifestar.