El Guernica de Pablo Picasso es una de las obras mas importantes del artista español. En esta obra, Picasso expresa un concepto muy profundo de la condición contemporánea no sólo de los seres humanos, sino también de la empresa española en 1937 durante la Guerra Civil.

Picasso estaba trabajando en su estudio, en un edificio cerca del río Sena en Francia, cuando estaba tratando de inspirarse para un cuadro dedicado a su España para exponer en la Exposición Internacional de París. Era 1937, y poco después se enteró de los más grandes bombardeos aéreos nunca antes por la aviación nazi-fascista, justo en la ciudad de Guernica, en el norte de España.

Ese bombardeo, que arrasó todo, fue sólo un anticipo de lo que finalmente se produciría durante la Segunda Guerra Mundial. Así, a través de la iconografía precisa, en unos dos meses, el Maestro decidió representar en escala de grises, el drama profundo que vivía su país.

La escena se extiende horizontalmente con la técnica del Cubismo que tiende a deformar la realidad y reducir ambas geometrías siete grupos de personajes que, aún hoy, no conocen una interpretación precisa.

Aquì hay una presentacion de la obra en 3D:

Hay un caballo herido cuya boca representa una mina de guerra, el toro, símbolo de España que no sólo es la divinidad, la fertilidad y la fuerza, sino también al enemigo; entre los más grandes dolores de la condición humana, hay una mujer que grita en sus brazos el cuerpo sin vida de su hijo.

Sin embargo, una mujer que huye de las llamas y el otro sostiene una lámpara, como para significar el momento de regresión que conduce inevitablemente a un ataque de ese tipo, pero el grito desesperado de un hombre que llama la atención, ya que se quema en un edificio.

La escena mas importante es la luz en el centro de la obra y, según la mayoría de las interpretaciones, recuerda la forma del ojo de Dios, que «ve y juzga». Pero es la figura del soldado caído, a presentar la parte inferior izquierda de la imagen, para dar una (tal vez) esperanza a pesar del dramatismo de la escena: una espada rota en sus manos, como para representar a la juventud destruida por la guerra y, junto a una flor, un símbolo de que la vida gana siempre fuera de la muerte y la destrucción.

Quien quiera ver en persona la Guernica, se encuentra en Madrid, en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofia.