Las Agencias de Viaje han sido las fuentes principales durante muchos años de las que el ciudadano bebía para llevar a cabo viajes turísticos o compras de tickets para pasar las vacaciones. Cumplían una misión como organizador de esos viajes llamados “todo incluido” y además, hacían de intermediarios entre el cliente y empresas a la hora de comprar y recoger billetes de viaje por una pequeña comisión.

Cualquier agencia de viajes sostenible, tenía unos ingresos equilibrados entre estas dos funciones. En torno al 50% de lo que recibían venía de esas comisiones de compras y reservas de tickets tanto para noches de hotel como para un evento de ocio. En torno al año 2000, empezó el declive que hasta la fecha no ha tenido paliativos.

INTERNET, SU GRAN PROBLEMA

La entrada de internet en las casas, supuso una revolución en muchos aspectos de la vida cotidiana, y a la larga, esa sensación solo ha ido a más. Cuando cada familia tenía un ordenador en el salón, las Agencias de Viajes lo notaron en una manera muy negativa. Y es que los intermediarios, tan necesarios antes de Internet, no tenían tanta cabida en la nueva concepción consumidora de la sociedad. Por tanto, no es noticia ya ver como año tras año cierran unas agencias y otras disminuyen el número de trabajadores en plantilla. Si a esto se le suma la crisis económica, se presentan datos como que solo en 2010, cerraron 940 agencias de viajes en España. Al año siguiente la cifra llegó hasta 2.600.

Pero esto no quiere decir que los españoles hayan dejado de viajar. Simplemente, el turismo ya no está a pie de calle. Son incontables la cantidad de webs dedicadas al ocio vacacional y a presentarte ofertas de viajes por todo el mundo, en ocasiones a precios 2muy económicos. La linea que define Internet, el consumidor del s.XXI, sabe que puede ir buscando hasta encontrar – de verdad- la opción más barata. Además, el estallido de aerolíneas de bajo coste, ha desmontado la estructura que había en torno a ofertas de vuelto de las grandes compañías.

EL CAMINO PARA LA READAPTACIÓN

Las Agencias de Viaje tienen que caminar hacia su integración en Internet. Las sedes físicas ya no son necesarias, y los tickets se compran sin ningún intermediario. La opción de trabajar como agente de viajes está ya considerado como uno de los trabajos más “inútiles” que existen, según la consultora estadounidense Career Cast. Sin duda que un buen proyecto de viaje organizado puede seguir vendiéndose, pero el cliente ahora tiene a mano elegir cada paso de sus vacaciones. Solo en torno al 25% de los viajes de extranjeros a España se llevan a cabo por agencia.

La posibilidad de administrar personalmente cada elemento de tus vacaciones, genera inconscientemente desconfianza en los packs que una empresa te monta. Parece que las Agencias, teniendo por descontado que tener una presencia vital el Internet, necesitarán de una flexibilidad mucho mayor en cuanto a servicios que ofrezcan, e ir olvidando progresivamente los packs inamovibles de viaje, hotel y ruta turística.