MADRID, ESPAÑA. Hasta el 30 de marzo de 2014 estará disponible la exposición “Art Design: Diálogo entre dos épocas”. Es en la tercera planta del Museo Nacional de Artes Decorativas en Madrid, dónde hasta ahora sólo había piezas de época Borbónica del siglo XVIII, donde se les unen unas nuevas obras modernas con el fin de mantener ese “diálogo” entre obras de épocas diferentes del que habla el título la exposición.
Las obras que conforman la muestra son algunas de las piezas de Art Design seleccionadas por Rossana Orlandi -referente internacional del diseño industrial-, de entre todos los participantes de la Feria de Diseño Industrial del pasado mes de noviembre en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid.
Son 16 los artistas nuevos que se han unido desde el pasado 14 de febrero a esta tercera planta, junto con otras 20 de cerámica de artistas brasileños, inspiradas en la obra del portugués Raphael Bordallo Pinheiro, artista cuya fábrica de loza vidriada se inauguró en 1884, mismo lugar donde han trabajado estos diseñadores para finalizar sus obras.
A continuación, hablaremos de algunas de las obras modernas expuestas en el museo.
Esta obra se llama “El beso”,y es de díez+zeíd diseño. Surge de la idea oriental de dotar a cualquier cosa, cualquier objeto inanimados de un alma o espíritu, lo que nos permite jugar con la idea de dotar a esta pieza de cualidades propiamente humanas como es un beso.
“Pámpara”, de Joel Blanco, es el segundo objeto expuesto en el Museo Nacional de Decoración del que hablaremos aquí. Se trata de una iluminación de cerámica con forma de un alimento tan cotidiano y presente en cualquier hogar como es el pan, una vinculación entre dos productos artesanos, cerámica y pan.
El “Chandelier” de María José Gutiérrez Encinas es una de las obras más llamativas de la tercera planta del museo. Una potente luz roja de neón recorre el tubo de vidrio dando forma a esta famosa lámpara: una lámpara de araña. El fin de estas lámparas es que dialoguen con el espacio que les rodea dónde se encuentran ubicadas.
Paul Manriq tiene la suerte de poder mostrar dos de sus obras en este museo: “Inconsciencia” y “¡qué calorcito! (líne liquid)”.
La primera, una original fregona, pero que prescinde de su uso habitual para tratar de ser parte de la iluminación de cualquier sala. Como se puede apreciar en la fotografía de abajo, en el interior del palo han dejado sitio para gran cantidad de pequeñas bombillas de led de color blanco.
La segunda, una mesa que parece que se derrite por momentos. De color negro, parece que su material se derrite, cayendo las gotas al suelo de la galería.
El último, “Exoesqueleto” de Paco Ortí intenta hacer reflexionar sobre la vulnerabilidad del ser humano ante la vida, por la falta del exoesqueleto, presente en algunas especies animales, que se trata de un esqueleto externo que protege y recubre el cuerpo. Al nacer, el hombre lo hace de una forma indefensa, sin protección, siendo por ello muy frágil.
Son sólo 6 obras de las 18 disponibles, sin contar las obras de cerámica también expuestas en esta tercera planta del Museo Nacional de Artes Decorativas. Obras originales, vistosas y divertidas que harán ver a los objetos que se presentan de una forma diferente a la de su uso original.